Juan Manuel Cobo

Juan Manuel Cobo, del balón a la ópera

 

1 2 3   Cobo Datos Estadísticas Títulos (1)

Nombre:	Juan Manuel Cobo González
Fecha de nacimiento:	15/04/1948
Lugar de nacimiento:	Cabezón de la Sal (Cantabria)
País:	España
Demarcación:	Defensa

Notificar error Equipo TemporadaDivEdadPJPCPTPSMin   

	Betis		1971-72	1ª	23	10	8	9	1	831	0
	Betis		1972-73	1ª	24	27	25	27	0	2391	3
	Betis		1974-75	1ª	26	31	28	31	0	2691	3
	Betis		1975-76	1ª	27	23	18	20	3	1819	1	1
	Betis		1976-77	1ª	28	32	32	32	0	2880	5		2
	Betis		1977-78	1ª	29	17	9	11	6	1164	3
	Betis		1979-80	1ª	31	3	2	3	0	257	0

 

Juan Manuel Cobo, caracterizado como moro en la ópera 'Alahor en Granada'.

Juan Manuel Cobo, con la Copa del Rey de 1977 justo después de recibirla de manos de Don Juan Carlos I (detrás) en el palco del Calderón.

 

 

Juan Manuel Cobo (Cabezón de la Sal, Cantabria, 1949) tiene un hueco de honor para siempre en la historia del Betis. No por estar once temporadas en la disciplina verdiblanca, ni por ayudar en los ascensos de 1974 y 1979, que también. Lo tiene porque lució el brazalete de capitán en la histórica noche del 25 de junio de 1977, en la final de la Copa del Rey ante el Athletic, y porque es el hombre que recibió de Don Juan Carlos I el primer trofeo que se disputaba en su nombre.

 

 

Tres años después de aquel hito, Cobo se retiró. Del Betis y del fútbol. Apenas tenía treinta años, pero ya estaba cansado de los sacrificios del balompié. Y entonces retomó su afición de verdad: la música. Pero Cobo no compone. Cobo canta. Es algo “genético”: su padre fue actor de teatro amateur, su madre cantó en el coro del pueblo hasta con 80 años y sus hermanos llegaron a ser famosos en Santander por sus dotes para el canto. Cobo no fue menos. Ya en su tierra natal formó parte del Coro de Voces Cántabras, de gran prestigio nacional, y por supuesto estudió canto y solfeo. Y en Sevilla, en cuanto dejó el Betis, recuperó ese camino: primero en los Salesianos de Triana, luego en el Coro de San Felipe Neri y finalmente, y hasta hoy, en el Coro de la Maestranza (apócope de su nombre auténtico, el Coro de la Asociación de Amigos del Teatro de la Maestranza). De hecho, es uno de los socios fundadores porque fue elegido en las primeras audiciones, allá por 1995.

 

 

Cobo es barítono. Es “la voz natural del hombre”, sin llegar ni a los tonos más agudos ni los más graves. En estos casi quince años en el Coro de la Maestranza ha participado en casi todas las óperas: Nabuco, Fidelio, El Barbero de Sevilla, El Holandés Errante… Este año cantará Cyrano de Bergerac y La Favorita, entre otras. Y no sólo actúa en Sevilla: acudió a la inauguración del Palacio de la Ópera de La Coruña, cantó en el Palau de la Música de Valencia, estuvo en Málaga, en Salamanca, en Las Palmas…

 

 

La música, dice Cobo, le gusta “más” que el fútbol. “Ser futbolista me encantaba, pero esto me llena más. La ópera es el espectáculo total”, sentencia. Eso sí, aquella final del 77 también es “un sentimiento difícil de explicar, una cosa que sólo ocurre una vez en la vida”. “En la música también hay momentos mágicos a veces que le llegan a uno a lo más profundo de su ser”, revela. Sus compañeros en el Betis nunca conocieron la afición secreta de su compañero en las tareas defensivas. Él, en cambio, sí advirtió algún que otro talento oculto: “A Antonio Benítez le encantaba el flamenco. Entendía y cantaba muy bien. Gitano lo llamábamos”.